Donde tu verdadero yo brilla, con o sin ropa
Oye, ¿alguna vez has pensado en mostrar al mundo quién eres realmente, sin máscaras ni filtros? Eso es justo lo que hacemos aquí. No es solo tomar fotos bonitas, es tu oportunidad de revelar ese lado tuyo que quizás ni tú conocías del todo.
Es como un día de spa para tu alma, pero en lugar de mascarillas, tienes una cámara capturando tu verdadera esencia.
Mira, sabemos que la idea de ponerte frente a la cámara puede dar nervios. Pero te cuento cómo es el proceso para que veas que no solo es fácil, ¡sino hasta divertido!
Nos sentamos a charlar, como buenos cuates. Hablamos de lo que te late, lo que te da miedito, y cómo quieres verte. Tranqui, aquí nadie se quita nada todavía.
Llegó el momento. Respira hondo, ponte tu mejor sonrisa (o tu cara de galán misterioso, tú decides) y confía en el proceso. Yo te voy guiando en todo.
Aquí es cuando ves tus fotos por primera vez. Prepárate para decir “¡No manches, ese soy yo!” unas mil veces.
Sales del estudio con una confianza que ni tú te la crees. Ojo: puede ser adictivo sentirse tan bien contigo mismo.
Jugamos con la luz para crear imágenes que son parte tú, parte arte y totalmente increíbles.
Aquí buscamos al verdadero tú, con todas tus particularidades. Eso es lo que te hace único y fascinante.
No importa tu forma, tamaño o edad. Cada cuerpo tiene una historia que contar, y eso es lo que capturamos.
Esto va más allá de las imágenes. Es un viaje para redescubrirte y quererte más.
Para nada. Lo único que necesitas es ser tú mismo. Eso es más que suficiente.
Lo que tú quieras. Desde fotos completamente vestido hasta desnudos artísticos. Tú pones el límite.
Ni te preocupes. Tus fotos están más protegidas que los secretos de la abuela. No salen de aquí sin tu permiso.
“Al principio pensé ‘¿En qué me metí?’, pero después de ver las fotos… ¡Guau! No sabía que podía verme así. David, eres un mago de la cámara.”
– María, 35 años
“Siempre me he sentido incómodo con mi cuerpo, pero estas fotos me hicieron ver que tengo más de qué estar orgulloso de lo que pensaba.”
– Carlos, 42 años
Va, te cuento paso a paso cómo le hacemos: